Hace ya unos años, cuando un coche se quedaba sin batería y carecía de catalizador, solo con empujarlo, meter la segunda marcha y luego encender el contacto bastaba para alargar la vida de la batería.

Queremos contarte qué pasos seguir si te quedas sin ella, pero primero explicaremos por qué se nos queda el vehículo sin batería. Lo más normal es por un descuido, como dejarnos las luces encendidas, el contacto puesto durante una visita a casa de los familiares, etc. Pero también puede ser porque ya se ha gastado debido al uso.

Actualmente, todos los coches contienen un catalizador, que, en caso de estropearse debido a la combustión producida al tratar de arrancar el coche sin batería, puede ocasionarnos un percance por valor de 500 €, aproximadamente.

Ahora bien, como es lo más probable que nuestro coche tenga catalizador, hay tres opciones para arrancarlo con la batería gastada.

  1. Llevar la batería a un taller. Para llevar la batería al taller, debemos desconectarla, primero el terminal negativo y, luego, el positivo. Ellos se encargarán de recargarla y, en caso de no poder seguir utilizándola, podemos adquirir una nueva. Para colocarla de nuevo, se hace la operación a la inversa, es decir, primero conectar el terminal positivo, y seguidamente el negativo.
  2. Utilizar las pinzas. Probablemente esta sea la operación que más hayas visto en parkings, en una avenida concurrida o vivida en las propias carnes. Para llevar a cabo esta operación, no la realices sin saber. Lo principal es contar con un coche que nos “preste” batería, acercarlos sin tocarse, comprobar que tienen la misma tensión, encender el coche que nos presta la energía, prender las luces de nuestro coche (que no tiene batería, para eliminar picos de alta tensión).

La colocación de las pinzas debe ser la correcta, por lo que el terminal positivo de los coches tiene que coincidir, y, en el caso del negativo, se conimg_como_desconectar_la_bateria_del_coche_20467_600ecta la pinza del coche que presta batería y, del vehículo afectado, la pinza se conecta a un hierro que está apartado de la batería.

Luego, si la chispa no es muy fuerte, habría que acelerar el coche “bueno” hasta dos mil revoluciones. En este momento, el coche “enfermo” encenderá el contacto y, tras unos segundos, tratará de arrancarse.

Luego, para retirar las pinzas, habría que seguir el orden a la inversa.

  1. Llamar a la compañía aseguradora. Si realizamos una llamada a nuestra compañía de seguros, enviarán una grúa al punto donde te encuentres y la tratará de recargar. En caso de no ser posible, le acercará a un taller para su reparación.

Acuérdate que quedarse sin batería no es una avería grave, sino que nos hace perder tiempo y siempre ocurre de manera imprevista.

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